MI IMPENETRABLE SONRISA
RUTH SICILIA
Ed. Olelibros (2018)
Cuando
supe de esta obra me sorprendió que su autora, joven, se iniciara en la
publicación con su propia biografía. No obstante, y dadas las circunstancias
por las que atraviesan muchas mujeres con respecto al acoso y abuso sexual, se
hace imprescindible romper silencios.
A
Ruth le ha costado decidirse a alzar la voz, a rebuscar entre sus diarios y
recuerdos personales sus propias vivencias y hacernos partícipes de ellas a
través de MI IMPENETRABLE SONRISA. Durante muchos años esa sonrisa fue su
protección ante los abusos y acoso sufrido por parte de uno de los amigos de la
infancia.
El acoso se inicia cuando ella tiene cuatro años, en sus juegos de
niños. El escenario: la casa familiar, la cercanía. Son dos niños, pero el chico es más mayor, él tiene nueve años. La manipulación de la niña es muy fácil, mediante
el juego; en principio abrazos sin importancia, jugar a ser novios, luego las
fricciones disimuladas y los tocamientos.
En
un momento de la narración la propia autora se pregunta si su amigo no habrá
sido, a su vez, víctima de abusos y por eso no le da importancia al juego. Tal
vez él también juega a ser mayor. Pero el tiempo pasa y ese juego se prolonga. La
niña sigue siendo niña todavía cuando él ya ha alcanzado, primero la pubertad y
después la adolescencia. Ella no desea los abrazos que tanto la agobian, ni los
besos de novios a escondidas, ni que se cuele en su cama y exija tocamientos
que a ella la perturban. Intuye que no
es un juego normal y no desea participar. Ya no quiere ser novia de nadie, quiere ser fea y que no la
quieran. Quiere ser gorda y antipática. Aun así, se siente acosada, perseguida
cada vez que él está cerca. La familia no se da cuenta y los otros niños
tampoco. Y ella, como muchas otras, calla. Teme que no la crean, que la hagan
responsable de la situación. Se viste de culpa y sonríe.
Esa
culpa y el silencio marcan y acarrean consecuencias; y hay que ser valiente
para seguir adelante y hacerte mayor sin que te afecte. Pero a veces se abre el
telón de la propia vida y aflora el recuerdo. No hay rencor pero sí preguntas:
¿Por qué? ¿Por qué los roces y los tocamientos? ¿Por qué durante tanto tiempo?
¿Por qué a mí? ¿Acaso ha sido a alguien más?
Más
adelante, cuando Ruth ya es adulta, obtiene respuesta a la última de las
preguntas. Mientras tanto, el bolígrafo, los folios y también la obsesión por
la comida son sus aliados. Deja pasar la vida, con los amigos, las fiestas, las
excursiones a la playa y a los campamentos… y siempre con su impenetrable
sonrisa.
Pero
ahora Ruth tiene dos hijas y ha llegado el momento de romper silencios. Lo ha
hecho con una narración excelente, bien hilvanada, de lectura cómoda. Y lo hace
en un momento en el que las calles se llenan de voces gritando contra el acoso,
el abuso y las violaciones. Y también, como no podía ser de otra manera, contra
sentencias jurídicas incomprensibles.
Por
mi parte, finalizada la lectura de MI IMPENETRABLE SONRISA, a mí también me
surgen algunas preguntas… Pero esa ya es otra historia que, en algún momento,
la propia Ruth me contará personalmente si lo cree conveniente u oportuno.
Me ha encantado leer mi historia desde otra voz... Me vuelve a tocar la fibra. Yo cuando lo hablo y lo cuento consigo hacerlo desde una tercera persona, cono si hablase de otra persona, pero cuando leo la opinión de otras personas me hago consciente de que sigue siendo mi vida y mi historia de superación. Muchas gracias por tus palabras!!
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